Tras un fallido intento de suicidio en el río Han, un ejecutivo termina en una isla desierta ubicada en medio de la ciudad. Una joven, recluida en su habitación por años, lo observa de lejos y encuentra en él un motivo para salir de nuevo al mundo.
A través de su filme "Náufrago en la Luna", el cineasta coreano Hae-jun Lee realiza una fantástica historia de amor y esperanza de vida, tomando como pretexto a un ejecutivo frustrado y a una joven desesperada por su aparente fealdad física. La comunicación que establecen el joven náufrago y la mujer que espía cada movimiento suyo, no es menos absurda que lo anteriormente planteado, pero El director explora esta idea con una convicción y un desparpajo tan grandes que logra que todo funcione demasiado bien. Como se puede tomar una historia absurda, imposible y alocada para transformarla en algo bello, poético y maravilloso. El guión está elaborado a la perfección, con un lenguaje onírico y realista a la vez, llevándonos a los sueños y pesadillas de sus dos protagonistas, con un desarrollo fluido y constante, con una carga de comedia y de drama perfectamente equilibrada.
En resumen: una trama inocente, delicada y deliciosa que nos invita a reflexionar sobre las relaciones humanas, la tecnología, lo que es realmente importante para nuestra vida y lo que hay bajo las máscaras que todos nos ponemos para sobrevivir en este mundo.